Con la llegada del verano aumentan las temperaturas y la exposición al sol, lo que eleva también los riesgos asociados a la radiación ultravioleta (UV).
Aunque disfrutar del aire libre es parte de esta temporada, hacerlo sin las medidas adecuadas puede afectar la piel y la salud general.
Así, la exposición solar excesiva puede provocar quemaduras, envejecimiento prematuro de la piel, aparición de manchas y aumentar el riesgo de cáncer de piel.
Además, el calor intenso puede generar deshidratación e insolación, especialmente en niños, adultos mayores, embarazadas y personas que realizan actividad física al aire libre.
Durante la temporada, los niveles de radiación UV alcanzan sus valores más altos, incluso en días nublados. La radiación penetra la piel y, con exposiciones repetidas o prolongadas, puede generar daño acumulativo.
Entre los principales factores de riesgo se encuentran:
Adoptar medidas simples puede marcar una gran diferencia en la prevención de daños:
La insolación ocurre cuando el cuerpo se sobrecalienta producto de una exposición prolongada al sol o altas temperaturas. Puede presentarse de forma brusca y requiere atención.
Síntomas de insolación
- Dolor de cabeza intenso
- Náuseas o vómitos
- Piel caliente, enrojecida y seca
- Fatiga extrema
- Aumento de la temperatura corporal
Si una persona presenta síntomas compatibles con insolación, se recomienda:
Cuidarse del sol no es sólo una recomendación estética, sino una medida de salud preventiva. Proteger la piel, hidratarse adecuadamente y reconocer los signos de alerta permite disfrutar del verano de forma segura y evitar complicaciones.
En Clínica Alemana Temuco contamos con profesionales de la salud preparados para orientar, prevenir y atender oportunamente las patologías asociadas a la exposición solar y al calor, ya sea en la Unidad de Dermatología, como en el Servicio de Urgencia.